3 de abril de 2012

Primavera escondida

Todos los días que podemos, después de comer, salimos a dar una vuelta alrededor de la fábrica. Son 15 minutos, no llegan, pero coges la tarde con muchas ganas. Además el ratito de conversación se agradece. Y el aire fresco, el sol, o la lluvia y el viento.

Y detrás de la antigua nave donde se fabricaban llantas, se esconden unos árboles que no ve nadie, mas que nosotras cada día cuando pasamos por allí.

Y así estaban la semana pasada. Vaya regalo para los ojos... y para la nariz.

2 comentarios:

  1. Siempre tenía que ser primavera... Bueno, casi siempre pues es sinónimo de belleza, aromas y tantas sensaciones...

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  2. joder, q chulo, cuando vaya a coger algún recambio dare un garbeo

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