No me gusta madrugar. Aunque lo haga a diario. Pero no me gusta. Además, levantarse media hora antes dos días a la semana para llegar a clase, me cuesta horrores.
Aunque tengo un aliciente. Y no, no es lo que pueda aprender o lo que me pueda reir... me encanta poder hacer el trayecto en coche antes de las 7:30 am. Y es que si normalmente tengo que pararme en 5 semáforos y tardo entre 10 y 15 minutos, cuando voy antes, no me tengo que parar en ninguno y he llegado a tardar 3. No porque corra, sino porque no hay nada de tráfico. Y los semáforos están sincronizados para los madrugadores. ¡Vaya regalo !Y es genial.
Con eso basta. :) Aunque hay a quien no le gustan... y es que en Bután, en la capital se les ocurrió poner uno (el primero del país) para quitar al guardia de tráfico y hubo tantas protestas que aquí tenéis el resultado...
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