Ofrenda de flores en Burgos

Ayer empezaron oficialmente las fiestas de San Pedro en Burgos. Comienzan con el pregón en la plaza Mayor, seguido del canto del Himno a Burgos, largo, muy largo, pero que todos nos sabemos y cuando toca, cantamos con orgullo, algo que puede resultar curioso si no se es de aquí.

Y hoy, San Pedro, a mediodía, se lleva a cabo la ofrenda de flores a Santa María la Mayor, a los pies de la Catedral.

Bajo la atenta mirada de los Gigantones (entre los que están los Reyes Católicos, el Cid y doña Jimena) y de los Gigantillos, se va tejiendo un manto a los pies de la Santa María la Mayor, mientras suena la canción "burgalesa, burgalesa" a golpe de dulzaina

Tejiendo el manto

los Gigantones

 Todas las asociaciones de Burgos desfilan ante la Virgen depositando flores como ofrenda. La tradición empezó un par de años antes que en Zaragoza, donde ha seguido creciendo y creciendo y ganando fama, mientras que la de aquí, sigue siendo algo muy nuestro.

llevando las flores con el traje típico burgalés

Aun eso, además de trajes típicos castellanos, podemos ver gallegos, andaluces, mexicanos... ya que en Burgos nos gusta asociarnos, y a los extranjeros aquí afincados, también. Nadie se quiere perder el momento.

Mexicanos resguardándose del sol

nadie se quiere perder el momento

 Y como ciudad hermanada con Burgos, todas las reinas de fallas de Valencia, también hacen su ofrenda entre gritos de "guapas!" y admiración por los elaborados trajes que llevan.

Fallera

Fallera Mayor

 Y el manto sigue creciendo mientras las Reinas burgalesas hacen su entrada en la plaza. Y es que cada peña, tiene una reina, y hoy todas lucen sus mejores galas.

Las falleras dejando las flores mientras las burgalesas esperan a la entrada de sus reinas

Una de las reinas

Pero la entrada a la plaza, bajo el Arco Santamaría, la custodian unos personajes de los que ya se tiene constancia en el siglo XV: los Danzantes de Burgos.

 Los Danzantes son doce niños comandados por el Tetín mayor, al que acompañan dos Tetines menores, dos dulzaineros y un tambor redoblante. El traje del Tetín mayor tiene hasta cascabeles y a mi personalmente me recuerda al de la guardia del Vaticano. Quizá es que sean de la época.

Tetín mayor

tambor redoblante

 Como veréis, los trajes son muy curiosos y es que provienen del siglo XVI. Y el futuro está asegurado con los aprendices, que son tres, y van de verde.

dos de los tres aprendices de danzantes

 Y si, después de varias horas desfilando y con el calor, hasta los zapatos molestan.