Ayer vinieron unos buenos amigos a cenar. Hacía tiempo que tenía ganas de probar a hacer la famosa tarta de chocolate austriaca, que una vez, hace muchos años, llegué a probar en Viena. Y la hice.
Recuerdo el café como un sitio de principios de siglo, clásico, con manteles de tela y tazas de porcelana finas con los techos muy altos y mucha luz. No sé el nombre del local, ni de la calle, pero podría volver sin dudarlo.Y aunque no me acuerdo de la cantidad, seguro que pagué mucho dinero por aquel café y la tarta.
No la había vuelto a comer hasta que mi primo la hizo para Nochevieja, y en Año Nuevo pude comer un trocito.
La receta, la cogí de una página que me gusta mucho, Mercado Calabajío y queda super rica.
Como diferencias, yo hice dos mini tartas de 8 cms de diámetro (así que las tuve en el horno menos tiempo) y usé la mermelada de albaricoque, como en la tarta original. Además, como no tenía nata para la cobertura, puse más mantequilla (50% en peso del chocolate) y un chorrito de leche.
Para Dani, un super phoskito. Pero por dentro, nada que ver. Animaos a hacerla. Con café, de muerte.
Espero que os guste.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Gracias por tu comentario!