Pues sí, hoy he ido a la peluquería y he podido ver esos ojos brillantes de emoción ante un "corta lo que quieras, con tal de que me pueda coger coleta". Obviamente, no puedo (aunque ella dice que sí, que lo ha "calculado justo"). Y mientras cortaba poco a poco para dejarlo "gracioso", Isabel, a la que conozco desde que tengo uso de razón (porque ya iba mi madre a su peluquería), ponía cara de estar disfrutando como si fuera la primera vez. (Qué suerte).
Y me ha venido la cabeza cuando hace 3 años, paseando por la quinta avenida en Nueva York, justo antes de emprender viaje a la costa Oeste, me paró una chica y me preguntó que dónde me había cortado el pelo, porque la gustaba mi estilo y quería ir. Todavía me río cuando lo pienso.Y me he dado cuenta que nunca se lo había dicho, así que lo he hecho.
Creo no equivocarme al decir que hoy se ha ido muy hueca a casa. Y que ha estado algo más tiempo que de costumbre rematando el corte. :)
"Fíjate, en Nueva York..."
¡Que bueno! Hoy he sido yo la que he ido a la "estilista" como tu dices y enseguida me ha dicho que estuviste ayer. Sin embargo nada ha comentado de NY.
ResponderEliminarEs gracioso y, lo que digo siempre, lo que a tí no te ocurra...
pues se me había olvidado pero a Elena sí que se lo conté... jiji :)
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