Pan de cerveza

Allá por mediados de junio, tuve la suerte de volver a ver a un compañero de trabajo sudafricano que conocí en una reunión en Japón en 2009 y al que pensé que no iba a volver a ver. Estuvo en Burgos en otra reunión de trabajo, y acordamos, tiempo antes, que teníamos que tomar una cerveza juntos.

Salió un día espectacular, y acabamos mi hermana y yo llevándolo de pinchos y de "cortos" y el hombre emocionado haciendo fotos a los vasitos de cerveza, tan pequeños que no daba crédito, y venga a decir "qué buena idea...". Estaba tan emocionado, que me consta que se ha puesto manos a la obra a intentar hacer pinchos en casa y ya ha hecho una reunión "española" con sus amigos y familiares. Y es que Spain is different, que dicen por ahí.

¿Y por qué os cuento todo esto, si hoy toca receta, y además he puesto que vamos a hacer ¡pan!? Bueno, Chris (así se llama), me trajo una especie de cecina que hacen en sudáfrica, como cambio a un sobre de jamón que le envié a través de una compañera a otra parte del mundo (vaya tráfico, ¿verdad?) y ante mi pregunta de con qué se comía y cómo, me dijo "lo mejor para acompañarla, pan de cerveza". Y como que fuese una cosa que se hace todos los días, me dio la receta. De hecho me contó que era un pan rápido, que se suele hacer en el campo en hornos metálicos sencillos... si alguna vez consigo una foto de cómo va el invento os la pondré.

¡Pero qué me pasa hoy! ¡No puedo dejar de escribir! 

Vais a ver qué sencillo. No os asustéis e intentadlo. Si es vuestra primera incursión en el mundo del pan, os va a sorprender. Me contáis si probáis y así le cuento, ¿os parece?

Ahora sí, la receta (tal cual me la dio él):

Ingredientes
- 1 cerveza de tercio (de las de 330 ml aprox)
- 500 g de harina con levadura (la podéis encontrar preparada en el lidl por ejemplo)
- Ajos y queso

Manera de hacerlo

Mezclas bien la harina y la cerveza hasta que formes una bola que quedará algo pegajosa, y la dejas reposar tapada una hora en un bol. Verás que la masa crece. Pasada la hora, la sacas del bol sobre un poco de harina y la amasas un poquito (con dos minutos sobra) y la vuelves a dejar en un bol tapada con un trapo otra media hora para que vuelva a crecer.

Entonces, si sois valientes, añadis unos ajos machacados y queso del fuerte en trocitos pequeños al gusto (yo la primera vez no lo hice).
Precalentad el horno a 210ºC.

Humedeced un trapo limpio y manchadlo con harina normal y sacad la masa del bol sobre el trapo. Veréis que es un poco pegajosa pero no so preocupéis, está bien. Dadla forma de barra, o de panete o de lo que queráis, haced unos cortes por encima, echad si queréis un poco de sésamo para decorar o la dejáis tal cual.
Meted vuestro pan al horno a media altura y a los 40 - 45 minutos echad un vistazo a ver qué pinta tiene. Si está doradito, hora de sacarlo.

Ya me diréis qué os parece. Creo que merece la pena intentarlo. Así me quedó a mi según salió del horno.

¡Feliz lunes!